Escribir un blog con estrategia.
En cada ocasión en la cual publiqué un post intentando sistematizar estrategias de escritura para blogueras, encontré -básicamente- dos tipos de respuestas expresadas desde la más profunda convicción:
- Quienes agradecen el orden impuesto y eventualmente experimentan una sensación similar al "alivo mental" considerando que escribir un blog no tiene porque ser una tortura cotidiana si aplican determinadas reglas básicas.
- Quienes declaran escribir visceralmente -blogueras casuales, espontáneas, rebeldes a seguir ninguna regla establecida de antemano- y reclaman desde el comentario su espacio de libertad para escribir un post sin estrategias.
De esta forma, se reproduce en el modesto espacio de La Desmesurada, la dinámica de la historia desde el inicio de los tiempos. La historia como relato nace del conflicto y la oposición. Se avanza desde la diferencia, porque la identificación constituye una señal inminente del peligroso estancamiento en la conformidad. Y los estancamientos pudren, anulan toda vitalidad. La humanidad es saludablemente dicotómica en sus fundamentos. O dicho en términos coloquiales: decí algo -lo que sea- que inmediatamente vas a encontrar quien afirme lo contrario. Siempre. No tiene excepción. De las escasas certezas respecto a la dinámica espiritual humana que sostengo, quien la desconoce pierde la valiosa oportunidad de transformar la oposición en territorio fértil para la creación. Y para la venta, porque también es una de las herramientas básicas del marketing de servicios y productos. Adivinaste. Hoy se trata de la espontaneidad al escribir. Del storytellling. De rebelarse a las estrategias usando la estrategia suprema de la escritura. Hoy, se trata de vos.
¿De qué lado estás?
Pensalo un minuto. No respondas al trote. Tomate tu tiempo. Si, total, no te apura nadie...¿Tenés la respuesta? La más sincera respuesta te sitúa de un lado o del otro. Entre quienes agradecen la estrategia en la escritura de un blog o entre quienes la resisten.
Basta que afirme esto para que pienses: "Bueno... en realidad, a veces, estoy de un lado y a veces de otro" ¿Viste cómo funciona? Es un axioma. Bastó que hiciera una proposición incómoda para que encontraras la fisura. Inmediatamente encontraste el quiebre en el sentido frente a la aseveración rotunda que no te dejaba ni medio centímetro de libertad. Sucede lo mismo cuando escribimos. Escribir un blog te sitúa en un lugar de exposición. Ante la "amenaza" solemos tomar dos actitudes: despersonalizar o ignorar la amenaza. Rebelarnos frente a ella. Aún a riesgo de que sea una simplificación (los principios binarios generalmente lo son) te cuento que sea cual sea tu posición frente a la escritura bloguera, no escapás a las reglas del comportamiento, el sistema de signos o la plataforma desde la cual te expresás espontáneamente. No te engañes: todos tenemos una estrategia de escritura.
Escribir desde las visceras.
Te sentás frente a la pantalla en blanco del editor de texto y empezás a escribir. No trazaste una ruta y más allá de la elección del tema, la posibilidad de una estrategia de redacción de contenidos te parece un ejercicio de profesionales. Demasiado técnico. Escribís por impulso, dejándote guiar por la intuición sin que medie un esfuerzo conciente....
Sinceremos la situación desde ya: yo escribo de esta forma. Sea un ensayo técnico o un post de este blog, se originan "en bruto" frente a la página blanca. Desmesuradamente blanca. Me siento frente al editor de blogger y escribo. Escribo demasiado. Más de lo que hablo, lo juro. Pero tan importante como conocer mi habitual forma de proceder por escrito es reconocer que la visceralidad en sí misma es una estrategia de escritura. Si te sentís identificada, la espontaneidad es tu estrategia. Llamale como quieras: dejar fluir, escribir sin censura, libertad expresiva... La apariencia casual de tus post no es tan casual si los mirás detenidamente. Para escribir con el piloto automático se necesita confiar en una estructura textual introyectada. O mejor dicho: para escribir un post de tu blog "espontáneamente" usás una estructura compleja previamente incorporada a tu estilo personal. De lo contrario tus post serían ilegibles. Y no hablo solo de usar párrafos sino de cómo organizás el contenido verbal para que no sea una caótica catarata de palabras que pierden el sentido frente a los ojos del lector.
Lo tuyo es el storytelling.
Contar historias, enhebrar anécdotas, desgajar tu identidad en palabras para compartirlas pero sin abandonarlas a la bartola del subconsciente es lo que se da en llamar Storytelling. El flujo de conciencia es lectura experimental: escribir impone la elección de categorías -artículos, sustantivos, adjetivos, conectores- propias de tu estilo personal y que forman el "núcleo semántico" de tus post. Es decir, tarde o temprano todos repetimos aproximadamente las mismas palabras acomodadas de la misma manera, con el mismo tono y similares estrategias. Si querés conocer las diez estrategias de la escritura bloggera espontánea, entonces seguí leyendo porque a continuación las detallo punto por punto. Para que reflexiones sobre cuáles utilizás habitualmente y la próxima vez que las palabras se te resistan a la hora de escribir una entrada de tu blog, puedas usarlas a tu manera.
Las diez estrategias de los espontáneos.
1- Agrupación de temas: naturalmente tendemos a agrupar temas u objetos que comparten características comunes para facilitar su desarrollo. Si mirás con atención los primeros juegos de tu hijo, pronto vas a descubrir que categoriza los objetos por su forma, tamaño color o incluso por el valor emocional que le confiere a cada uno. Lo mismo hacemos con las ideas. Aún cuando creemos que no planificamos lo que escribimos, el proceso de selección y agrupación se produce de forma más o menos natural (porque las conexiones entre ideas no son universales) Si te interesa un ejemplo de agrupación de ideas, no tenés más que pensar en un decálogo, como el que escribí en cómo escribir un tutorial DIY o el post "Diez confesiones de una madre".
2- Relación de causa-efecto: es uno de los procedimientos primarios de la escritura. Escribir es un proceso lineal, en el que solemos citar primero las causas y luego los efectos para conservar el orden lógico de las ideas. Hacer lo contrario es desafiar los límites de la comprensión y por lo tanto es un recurso estético. Si te cuento cómo decorar una torta antes de mostrarte cómo la preparé...o no me interesa que lo sepas porque no es el objetivo de mi entrada o puedo tener la particular intención de que comenzar desde el final para incentivar tu curiosidad. Si querés un ejemplo concreto, comparto contigo una entrada que escribí cuando nacieron mis ahijados: Qué pasa cuando nace un bebé. artículo en el cual comienzo citando "una causa" para expresar posteriormente las emociones que se desencadenan con la llegada de un nuevo miembro a la familia.
3- Organización en secuencia lineal: salvo cuando nos proponemos intencionalmente quebrar con la secuencia de ideas, narramos linealmente. Por demás complejo es plantear la simultaneidad. Vamos a suponer que estás escribiendo un tutorial DIY. O, mejor aún, una receta. Por más que vos puedas batir las claras mientras se cocinan las yemas, la única forma que tenés de contarlo es linealmente, en una secuencia. Primero me contás que tengo que batir las claras y luego lo que hago con las yemas. ¿Es un ejemplo espantoso, no? Espero que tu inteligencia culinaria supla mis deficiencias y comparte contigo uno de los post que escribí recientemente utilizando esta técnica: Preparando la navidad en familia.
4- Organización jerárquica (de lo insignificante a lo esencial o viceversa): de la misma forma que ordenamos linealmente, ordenamos por jerarquías. De modo intuitivo, tendemos a contar primero lo importante, para luego abundar en detalles. En el blog dedicado a la experiencia de la maternidad que supe tener, dediqué una serie de post a la experiencia de organizar los primeros cumpleaños de mi hijo. Si tenés cinco minutos en otro momento, dedicalos a la lectura de esta entrada prestando atención a la estructura. Vas a ver ilustrado el proceso de jerarquización de contenidos.
5- Organización cronológica: quizás por el hecho de que somos seres temporales, solemos organizar nuestras ideas en función del tiempo. Si estás escribiendo o por escribir la última entrada de tu lifestyle blog y querés contarme los detalles del viaje que realizaste durante las vacaciones, probablemente elijas empezar con el procedimiento para sacar el pasaporte, la selección del itinerario, la compra del pasaje, el armado de la valija, etc. Temporalizar es una estrategia de escritura que se da la mano con secuenciar linealmente y es la forma en la cual abordamos contenidos anecdóticos para redactarlos. Como en la ocasión en la cual di forma de texto a mi experiencia como emprendedora.
6- Sucesión de características o propiedades: Es el procedimiento propio de los DIY, en los cuales agrupamos los materiales y las acciones en función de sus peculiaridades (herramientas, insumos, apliques, loqueseteocurra) para organizar el panorama de las acciones a seguir. Pero también es uno de los procedimientos usuales para describir otro tipo de situaciones o circunstancias, como es el caso de este post dedicado a las características de un niño de cuatro años.
7- Comparación de ideas u objetos: comparar objetos, situaciones o ideas es una estrategia básica de escritura. Relacionar tu nuevo vestido con una anécdota vivida en las rebajas de temporada. Contar un episodio de tu vida personal ligado al objeto que estás construyendo, reciclando, transformando. Analogar a través de los sentidos o de las emociones. No necesariamente por lo que es el producto o el servicio en sí mismo sino por cómo me hace sentir. Es el caso típico de esas galletitas de avena que tienen olor a la casa de tu abuela, en consecuencia -mientras desarrollás la receta muy bloggera y espontáneamente- este recuerdo persiste y pide ser contado.
8- Contraste de ideas u objetos: es el procedimiento inverso y complementario del anterior porque se fundamenta en el mismo principio. Es el caso de las bloggeras que eligieron como estrategia de escritura hacer un post con la lista de sus no-metas para el nuevo año. O quienes enumeran lo que van a perder al iniciarse un ciclo nuevo. Fue mi caso cuando escribí "Yo tengo una causa."
9- Orden inductivo: es otra de las estrategias de escritura de los tutoriales DIY. De la suma de procedimientos que realicé para hacer velas artesanales obtengo un resultado particular y supongo que, todo aquel que realice los mismos pasos (respetando las indicaciones) debería obtener el mismo resultado o uno similar. O sea, si usás parafina y seguís mi paso a paso y recomendaciones sobre la temperatura del material, tenés que poder hacerte una vela. También es el procedimiento que puedo usar para recomendarte una crema para la dermatitis del pañal, un electrodoméstico ultra-sofisticado o un viaje a una ciudad extranjera. En este caso, quien escribe tiene incidencia directa en el proceso por el cual quien lee percibe el objeto, el servicio, etc.
10- Orden deductivo: Y ahora te dejo que concluyas solo: deductivamente. La deducción, puede realizarse a través de palabras o de imágenes. De hecho, para ejemplificar esta estrategia de escritura para tus post, voy a utilizar un ejemplo basado en las imágenes. Por un momento ponele que sos una fashion blogger y adorás tu nuevo par de jeans. Como conozco el alma humana, no te cuento las fabulosas características de su textura y color. No hago un credo de su comodidad incomparable con otra experiencia mundana. Te muestro una fotografía de mi cuerpo corriendo grácilmente con el jean puesto. Ajustado todo él pero con espacio suficiente para el teléfono celular. Es tan suave y me siento tan bien que me subo a una moto, trepo una montaña, me tiro en paracaídas y caigo parada. ¿Viste? No te dije que era cómodo, pero te quedó clarísimo si observaste toda mi humanidad desplazándose por el aire enfundada en jeans.
Contame un cuento.
Querida espontánea: en este momento se rebela tu líder libertario interior negándose a reconocer que utilices alguna de las estrategias de escritura anteriores. Primero que nada, porque son estrategias. Y segundo porque justamente vos no usás este tipo de insolencias textuales. Escribís como "te nace". Déjame ser antipática. Si no utilizás alguna de las estrategias textuales anteriores (o sus correlatos) no estás escribiendo. Escribir un blog es un acto estratégico, intencional y destinado a la lectura. Lo dije antes, escribimos para ser leídos en consecuencia. no lo hacemos a la bartola más allá de la cantidad de palabras dedicadas a cada entrada. Dicho esto, asumiendo la responsabilidad del malestar que puedo provocarte, te cuento dos cosas de las cuales espero tu opinión más sincera:
1- ¿Qué te parece la idea de sistematizar todas las entradas anteriores sobre la escritura de un blog en un e-book gratuito?
2- ¿Cuáles son los temas que te gustaría que se desarrollaran los próximos miércoles (porque te incomodan y no te dejan bloggear en paz)?
Me despido con la ilusión de leer tu comentario para hacer que este espacio se parezca, cada vez más, a lo que te gustaría leer.