Sillones de pallets

Sillones de pallet DIY

Este es el momento en el que podría caer en un exceso de confianza ("hybris" le llamaban los griegos) y afirmar "miren qué lindos me quedaron estos sillones de pallets". Pero estaría mintiendo. Y aunque nadie más lo supiera, yo lo sabría. Por lo tanto, mi post comienza con una sentida confesión de falsedad al espíritu DIY: tengo unos hermosos sillones realizados con madera de pallet. Su estructura responde a las medidas y el modelo que tengo en mente desde hace tiempo, pero las manos artesanas no fueron las mías sino las de un carpintero que conocí por esas alegres casualidades de la existencia. Ahora que confesé mi pecado, las distraigo con una historia. 

Sillones de pallet DIY

En el 2009 quedé embarazada y comenzamos a buscar casa propia. Todo junto y con una alarmante ingenuidad de la repercusión logística de ambas novedades familiares. De la travesía de búsqueda inmobiliaria, atesoro cientos de anécdotas y kilómetros de ciudad recorridos. Fui testigo de las más insólitas y ridículas singularidades hogareñas: ventanas que dan a un muro, patios techados a una altura poco convencional (es verdad que soy relativamente alta, pero agacharme para pasar al patio...), una cocina en el dormitorio, un inodoro en la escalera... Sí, leyeron bien: no estoy hablando de una habitación independiente "bajo" la escalera sino de un inodoro huérfano de otras comodidades en el hueco de una escalera que no daba a ninguna parte, porque la puerta exterior había sido bloqueada con material. Lamento en el alma conservar esas fotografías que fueron tema de conversación por semanas. Pueden imaginarse que mi umbral de expectativas se flexibilizó con el correr de los meses -a medida que la panza crecía y la fecha de parto se acercaba- pero durante todo el proceso tuve dos requisitos inexcusables:

- Una casa habitable para el bebé (dos adultos y tres mil libros). 
- Un mínimo de espacio al aire libre.

Sillones de pallet DIY

Cuando ya entraba en el octavo mes de embarazo, encontré mi nido. No era perfecta, necesitaba un reciclaje paciente... pero apenas la vi supe que era mi casa. No es una expresión formularia aunque de esa forma se escuche: al entrar me visualicé viviendo con mi familia en el espacio ya reformado. Por si fuera poco, no solo era habitable para los tres mil y un bebé de la familia sino que tenía un patio. Despojado, cuadrado y de pocos metros. Los suficientes para tener sol y plantas. Desde ese momento de revelación, sueño con los muebles ideales para hacer del patio un espacio más de la casa. Este año, cuando volvimos a mudarnos   no estuve dispuesta a esperar más por el sillón ideal de madera oscura y pulida e intenté pensar en una solución a la medida de nuestro gusto, presupuesto y necesidades. Así nacieron dos butacones de diseño simple, realizados con una madera rústica y resistente a la intemperie.

Sillones de pallet DIY

No tuve que esperar mucho por ellos: hablé con el carpintero la tarde del domingo y me los entregó el miércoles (¡doblemente bueno!) bajo una lluvia torrencial. La ansiedad por verlos en su lugar definitivo conllevó una mojadura fuera de serie. Pero... ¿a quién le importa? Ellos eran una realidad y mi imaginación ya estaba en otras tierras: el estampado de los almohadones, el nuevo color para la pared del fondo y renovar las plantas que sufrieron el invierno y una plaga hostil. Todos los proyectos que una tiene cuando se enamora. Además, el amor es exhibicionista por naturaleza y el enamorado quiere que el mundo entero conozca su emoción, por ese motivo me sumo al finde frugal de Colorín Colorado.

Sillones de pallet DIY

Otro detalle para esa observadora atenta: en el patio de mi hogar no conviven las plantas, las alfombras y los espejos cotidianamente. La respuesta es más práctica que estética. Estamos pintando el living y dado que los metros no abundan, tenemos objetos insólitos por toda la casa. Me voy de visita a inspirarme con verdaderas creadoras, y las espero el lunes para seguir desmesurando.