Hoy es el día oficial del armado del árbol de navidad para mi familia...y supongo que para muchas familias más, ya que es una fecha tradicional vinculada al calendario religioso.
El año pasado, guiada por un capricho que me reservo desde la infancia, compré un árbol grande -muy grande y en consecuencia difícil de guardar- para el cual elegí adornos hechos a mano en hilos sisal y con un esquema de colores tranquilo: blanco y plateado. Cuando una tiene un alma neutra y temerosa al color, la tiene en todas las estaciones del año...
Disfruté de armarlo y de encenderlo (porque las luces de navidad me pierden y si de mi depende las uso todo el año). Sin embargo, no siempre se dispone del espacio necesario para guardar un árbol de navidad de dos metros (con ese tamaño es un integrante más de la familia y necesita su propia habitación).
Entonces buscamos una opción más mesurada, como este árbol de navidad diferente realizado en papel o más natural, como mi último árbol de navidad hecho con restos de poda. Todo depende del estilo personal y de los recursos de los cuales se dispone, pero sea cual sea el diseño o la medida, el 8 de diciembre, no dejes de armar tu árbol de navidad.